sábado, enero 31, 2009

Sábado de Recolectivo

Si les gustan los relatos futuristas y el fútbol, entonces vayan a leer la mamada que escribí aquí.

jueves, enero 29, 2009

Como piojo ahogado

Amaciza la cabeza, mijito, ordenó mi abuela. Estiré un poco el cuello, levanté la barbilla y la abuela continuó quitándome los piojos con sus uñas afiladas.

Yo miraba triste cómo los pequeños puntos negros se ahogaban dentro del vaso con agua que reposaba sobre la cómoda. Los imaginaba pataleando y pidiendo auxilio. En ese momento hubiera querido tener un par de Fruti Lupis en la mano, para lanzárselos.

¡Auch!, ¡me duele agüelitaaa!, exclamé. ¿Quieres que mejor te rape? Ándale, te voy a rapar con las tijeras para que todos en la escuela te digan “pelón”.

No volví a soltar un quejido. Tampoco le confesé que en la primaria ya me decían “pelón”, por mi amplia frente.

La habitación se impregnó con el aroma de la cocina. Por la cortina se colaba un rayo de luz que pegaba directamente en el cuadro del Sagrado Corazón que, a la fecha, cuelga de la misma pared.

Ya mero acabo, no te me desesperes, dijo la abuela, mientras espulgaba y deshebraba un mechón de mi pelo. Yo sólo pensaba en la alberca inflable que habíamos visto en oferta esa tarde. La de los buzos y tiburones estampados que estaba a mitad de precio en el Astra. Si te portas bien te la compro, me prometió.

Amacicé bien la cabeza y aguanté sin moverla lo más que pude.
Ya me veía chapoteando dentro de ella, como los piojos ahogándose en el vaso.

miércoles, enero 28, 2009

Los precandidatos quieren ser mis amiguis

En esta época preelectoral, de hartazgo ciudadano, apatía y regodeo de funcionarios públicos, es muy común que los partidos políticos de todos los estados promuevan a sus llamados “Candidatos Jóvenes”, esos títeres bien parecidos que dicen portar nuevas fórmulas para hacer política y, con ellas, alcanzar el verdadero cambio social que nos beneficiará a todos. Sí, me refiero a esos chamacos miones, de supuesta trayectoria limpia y visión renovada, a los que promocionan engañosamente entre los jóvenes como: "¡Mira, él es un chavo como tú! ¡Vota por él porque él conoce la problemática de los jóvenes y le preocupan las mismas cosas que a ti te preocupan porque es un chavooooo, goya goya cachún cachún ra ra!".
Pues si, el Chavo del 8 también es un chavo, pero no deja de ser un pendejo.

Todo lo anterior viene a colación porque últimamente me han llegado invitaciones de jóvenes precandidatos a algún cargo de elección popular a que los dé de alta en el MSN, Facebook, Hi5, Flickr, Blogger y demás redes ñoñas para socializar y buscar amigos que nunca han sido tus amigos. Como que el Internet se convirtió en la nueva estrategia de la política mexicana moderna para “llegarle a las nuevas generaciones”.
Para empezar, yo me pregunto: ¿por qué habría de identificarme o creer en alguien sólo por ser joven? Segundo, e insisto con lo mismo que ya había dicho antes: ¿quién chingados quiere tener gente que no conoce ni admira entre sus contactos? No tengo ni a mis amigos, ¿para qué quiero dar de alta a alguien con quien nunca voy a platicar y sé que utilizará este medio para mandarme su propaganda política y tantear más o menos la cantidad de votos que recibirá en las próximas elecciones? ¿De qué sirve tener de "amigo" a alguien que sé que borrará mis comentarios cuando le haga un cuestionamiento que no le parezca, alguien que no atenderá mis demandas o pondrá atención en mis necesidades o las de los demás? No me interesa, gracias.
No sé qué crean o qué les digan a estos candidatos sus equipos de campaña, pero no hay nada más erróneo, mamón e ignorante que creer que, por ser jóvenes y usar lo último en tecnología, los demás jóvenes se van a identificar con ellos.

Nomás por pura curiosidad, el fin de semana di de alta a uno de estos jóvenes precandidatos a un cargo de elección popular, y las tripas se me voltearon como calcetín. Basta con meterse a leer su perfil para medir el ego y la soberbia de los tipos que buscan “representarnos” y “cambiar a México”. Su perfil no es más que su curriculum inflado, mencionando “hazañas” insustanciales que a nadie le importan. Es aún más terrible meterse a curiosear entre sus aburridas fotografías y ver al precandidato con su familia supuestamente perfecta, o muy seriecito, guardando la compostura en algún evento público, o parado en un podium, dando algún discurso frente a una audiencia que batalla para disimular los bostezos. Repito: ¿por qué habría de identificarme con alguien así?

En lo personal, yo nunca me identificaré con alguien que haya agarrado la ingeniería, la abogacía, la contaduría o la política como profesión, por más joven que sea. Menos me identificaré con alguien a quien se le debe llamar “Licenciado”, “Ingeniero”, “Señor” o hablarle “de usted” por un respeto que nunca se ha ganado. Y, menos, si todo lo anterior se lo tengo que decir a alguien de mi edad. A “un chavo como yo”. Entiendan: la edad no hace que las personas se identifiquen.

Lo que veo es que quienes buscan desesperadamente nuestro voto, el voto de los jóvenes –y no tan jóvenes como yo, snif-, siguen gastando su dinero –o nuestro dinero- en campañas pendejas para promocionar su imagen -porque carecen de personalidad-, y no entienden que los jóvenes con dos gramos de cerebro y poquito más de corazón nos identificamos con otro tipo de personas, tenemos otro tipo de héroes, admiramos otras corrientes de pensamiento/acción y creemos en otro estilo de mesías. Personajes, héroes, filosofías y mesías que, por lo general, no se andan autopromocionando para sacar un beneficio propio. No se dan cuenta que, a pesar de nuestra apatía por ir a sacar una credencial de elector para votar en una boleta por alguien que no nos convence, verdaderamente queremos un mundo mejor y luchamos por un cambio todos los días. Esa apatía surge simplemente por habernos dado cuenta que por ahí no va la cosa; que el camino que nos ofrecen, el camino que nos quieren trazar y pretenden que sigamos en contra de nuestra voluntad, no es el correcto. Creo que lo mejor es hacer nuestra lucha personal, individual, digna y en silencio, hasta sintonizarnos con otros en el mismo canal o nivel espiritual, sin tanta fanfarronería ni bla bla bla, para que el verdadero cambio llegue.

Los dejo con el video de un güey que admiro, para que más o menos asimilen las mafufadas que acabo de decir, snif.

martes, enero 27, 2009

Más caricaturas y pensamientos

Nunca me ha gustado ver lo bonito de este país. Siento que es una posición muy cómoda y cobarde enfocarse en lo positivo. Es como decir que Acapulco es hermoso mientras te hospedas en un hotel de lujo y playa limpia. Es subirle al volumen del estéreo y voltear al otro lado cuando el pordiosero se te pega al vidrio del coche a pedirte una moneda, mientras sigues pensando que esta ciudad es la mejor del mundo.
A mí siempre me ha gustado ver lo feo; lo que provoca espanto, asco, depresión y horror. Siento que sólo así podemos abrir los ojos. Por lo anterior me han tachado de pesimista, negativo, malinchista y antipatriota. En lo personal, creo que aquél que sólo se clava en lo bonito de este país, aquél que todo lo ve bien y nada le molesta, de nada se queja y nada denuncia, por consecuencia, es un cobarde que no ama su tierra. Yo, por eso, le tiro mierda.






El día que dejemos esa mentalidad mediocre de "como México no hay dos" y empecemos por cambiar nosotros y nos unamos y nos encabronemos mucho y dejemos de deslumbrarnos por pendejadas, ese día el país cambiará.

P.D. La mítica película Network, de 1976, tiene una escena que ejemplifica de maravilla lo que acabo de decir.

lunes, enero 26, 2009

Opinión Editorial

La semana pasada hubo dos notas que llamaron mi atención.

Una fue la persecución de un conductor por varias avenidas de Monterrey. Tras él iban 100 policías. El conductor sospechoso terminó abandonando su coche y escapando a pie.

La otra fue la captura del "Pozolero", ell hombre éste que metía a sus víctimas -supuestos narcos de bandos rivales- en tambos de ácido para deshacerse de sus cuerpos. Se presume que disolvió a más de 300.

En lo personal, creo que deberían declarar héroe nacional al Pozolero. De perdido este güey atrapa más malandros que los pinches policías pendejos.

sábado, enero 24, 2009

viernes, enero 23, 2009

Una de entre las muchas cosas que me cagan de Internet

Toda la bola de ñoños masturbadores y reprimidos sexuales que se la viven buscando el Hi5, Facebook, Metroflog, Fotolog o Blog de mujeres “guapas”.
Esos geeks que se hacen pasar por finos caballeros, nobles chicos que buscan amistad sincera o demostrar que pueden ser la otra mitad de cualquier mujer dejando mensajitos “tiernos”, “insinuantes” y llenos de urgencia en esas redes de socialización para discapacitados.
Que chingue a su madre quien no haya escrito o recibido alguna vez una mierda de las que a continuación escribo:

Ke ondAS!? EstaS ien wApaaa!!!

Wow, tienes unos ojazos, nena. Te dejo un besito.

Ke bOnitA sonrisa nIÑa. Bytes.

Hola niña. Sales muy wapa en esa foto. Besos.

Tienes unos lindos ojos.

Waaauuu… estas preciosa.

Sos hermosa. Il mio amore serás
(nunca falta el mamonazo que se cree interesante porque se sabe dos pinches frases en otro idioma).

Simplemente tu sonrisa me mata.

En vista de que te agregué solo puedo comentar que eres muy bella... espero no te moleste.


Internet: el paraíso de la gente que nunca cogerá; el edén de los destinados a jalársela de por vida.

miércoles, enero 21, 2009

Cari caca turas

Como lo supuse: la caricatura de la que hablé en el post anterior ya no existe.
No se perdieron de nada espectacular, simplemente dibujé al alcalde de Monterrey diciendo que "al cabo que ni quedía", en referencia a que ha sido relegado por la gente de su partido para que busque la candidatura al gobierno del estado. Lo que caló de mi dibujo fue que haya puesto "quedía" en vez de "quería", haciendo alusión a la discapacidad que tiene en el habla el Huevo Cartoon que tenemos por mandatario. En fin, así es esto.

Para los preguntones que me preguntan sobre mi trabajo de caricaturista político, les diré más o menos cómo funciona.

Por ahí de las 7 u 8 de la noche, de lunes a viernes, me mandan las tres posibles notas principales que saldrán publicadas el día siguiente. Los sábados y domingos me las mandan más temprano. Leo las notas, escojo la más "caricaturizable", hago el dibujo en un par de horas, lo mando -o a veces voy al periódico a hacerlo- y listo. A veces hago los dibujos más temprano o algunas veces tengo que esperar nota hasta las 12 de la noche.
Por lo general, dibujo temas locales. A veces no hay nota local, o hay pero no te puedes meter con el tema, es entonces que me piden que haga una caricatura nacional. Mi cliente frecuente es el presidente, que, como no es un periódico de circulación nacional, seguramente no ve mis dibujos y puedo dibujarlo como quiera, aunque sin írmele mucho al baño, snif. Pongo algunos ejemplos de caricaturas de este año y del pasado para que vean a lo que me refiero:


Esta caricatura parecería ofensiva... pero no lo es... aunque sí lo es... pero en el fondo no lo es... ¿Me explico?


Eso del zapatazo a Bush me dio tema para hacer como 7 caricaturas, jojojo; qué tramposo soy.


¿Ah poco no se ve relindo con esos cachetotes que le dibujé?

De las mejores cosas que pueden pasar, es que un presidente termine su mandato. Ahí sí ya lo puedes dibujar como el imbécil que es sin meterte en pedos con el editor o los intereses del periódico. Pongo un par de ejemplos:



A veces, de plano me dicen: "Hoy vete suavecito, ni le muevas porque la cosa está bien caliente"; entonces saco caricaturas sin chiste, neutrales, de las que hasta yo mismo me avergüenzo por no aportar nada. Por ejemplo:


¡Qué bárbaro! ¡Qué creatividad!


Cuando murió Mouriño me dijeron eso, "que me fuera suave", que dibujara un moño negro o algo por el estilo. Me quedé con la espina clavada de dibujar algo corrosivo, y, cuando nombraron nuevo secretario de gobernación, me saqué la espina y tiré el veneno que traía guardado desde el avionazo. Creo que esta caricatura se le ocurrió al mismo tiempo, el mismo día, a otros colegas moneros... es que el chiste es obvio, jajaja.


En el otro periódico que laboro, mi trabajo es semanal. Hago tira cómica a color con tematica inofensiva para chavos (esas de 6 cuadros que siempre subo aquí al blog), hago retratos de novios, caricaturizo gente que se la pasa en el "socialitos" e ilustración editorial.


Miren nomás qué guapos. Más guapos que en la vida real.



En el fondo, preferiría que por esto último me pagaran millones, para ya dejar de dibujar políticos cagones, snif.

Saludos.

lunes, enero 19, 2009

La del fin de semana

Ayer domingo me metieron una pedorriza en el periódico donde hago cartón político diario porque hice una caricatura del alcalde de Monterrey hablando como idiota (como habla a consecuencia de una deficiencia física al nacer) y diciendo una pendejada (como tooodas las que dice a diario).

En mi defensa puedo decir que no dibujé ninguna mentira. Posiblemente carecí de tacto y fui ofensivo al recalcar su, ¡ay!, snif, discapacidad digna de Teletón. Seguramente diosito castigará mi insensibilidad y tendré un hijo igual -o peor- de menso... pero me vale verga: yo ni voté por él ni creo en Dios ni quiero tener hijos.

En fin.

El problema con mi caricatura fue que, los fines de semana, el municipio de Monterrey manda mucha publicidad al periódico. Eso, obviamente, se traduce en hartos billetes. Lo que pasó fue que a la editora en turno de seguro le valió madre mi “monito”, nomás lo vio y no lo leyó, le dio luz verde, yo seguí muy campante echándome mis cheves en la noche porque había cumplido con mi trabajo y, ahora, el periódico corre el riesgo de que dejen de mandar desplegados y no les paguen la publicidad que ya salió publicada. Viéndolo desde ese punto de vista tan, ¡ash!, materialista, sí fue una gran cagazón la mía, jejeje; y, analizándolo más a fondo, el alcalde de este fundillo de ciudad es quien indirectamente paga parte de mi sueldo, cosa que me deprime sobremanera, bujujuju, pues no aguanta que le digan sus verdades.

¡Bah!, total... La vida es un carnaval y a veces es tan fea como la que cantaba esa canción…

viernes, enero 16, 2009

8X8

El ejercicio de ocho páginas en ocho horas que hicimos los dibujantes invitados a la FIL de Guadalajara, lo pueden ver aquí.

Mañana sábado tengo el 8X8 regiomontano, con puro chingón para dibujar monos.

Mañana habrá tira cómica aquí y en Recolectivo, para que tengan un fin de semana de provecho, leyendo monitos.

jueves, enero 15, 2009

Meee roba me roba el oso polar, me roba me roba me va llevar.
Me roba me roba el oso polar me roba me roba me va llevaaar...

miércoles, enero 14, 2009

Calendario

¿Quieren monitos a diario?, ¿tiras cómicas y chistes todos los días?
Pues entonces páguenme, bola de ca#$%&...

Jejeje, no es cierto.

Denle click aquí y tendrán eso todos los días.
Saludos.

lunes, enero 12, 2009

Lo que va del año...

El 2009 pinta bien. Prueba de ello es que me siguen confundiendo con el payaso Brincos Dieras.


Ya para desmentir rumores de que si soy o no soy el finísimo Brincos Dieras, aquí está el teléfono donde pueden contactarlo. A mí ya no me estén chingando.


El 2009 pinta bien. Han salido trabajos interesantes que no parecen trabajos:


Insisto: el año pinta bien; el que pinta medio gacho soy yo, snif.
Hay un proyecto -desde hace algún tiempo- de sacar un cartón semanal de celebridades en la sección de espectáculos de los diarios de Grupo Reforma. Hace un par de semanas me pidieron unas pruebas y ésta fue una de las ideas que se me ocurrieron (ojalá ahora sí se haga, snif):



El libro donde me publicaron el relato de "Balada para Madeline" lo pueden conseguir en este link. A mí no me lo pidan porque no es un proyecto mío de mí y yo no puedo venderlo directamente; yo fui sólo un invitado a colaborar en esa recopilación de relatos de escritores virtuales y la que se encarga de las ventas es la editorial. La presentación del libro será el 6 de febrero a las 8 de la noche, simultáneamente en el D.F. y en Monterrey en los siguientes lugares:

DONCELES 66
Donceles 66, Centro Histórico, México, D.F.

REBELS retrobar
Villagran con Espinoza. Centro. Monterrey, México

¡Están todos invitados!

Ya por último, fui captado infraganti por un paparazzi saliendo del baño de mi residencia californiana con una playera estampada con la imagen de uno de los grandes villanos del imperialismo yankee. Me doy asco, snif... aunque la playera está bien chida, jejeje (me la regaló Ale, la hija de la Fabi).

jueves, enero 08, 2009

Ya está lista la número 15 de ¡#$%&! Cómics. La pueden conseguir en Comic Castle de Monterrey, Guadalajara y D.F. Este fin de semana ya estará en el Café Brasil, Café Infinito, Café 16 mm, Cine Café Secuencial y Café Paraíso:


Y la número 16, sale en 15 días:


Los interesados en suscribirse a la revista, mándenme un mail a guffo76@hotmail.com para que reciban su colección a precio crisis en la comodidad de su mansión renacentista.

martes, enero 06, 2009

Guffo y su trágica -e inútil- lucha contra el mundo moderno.

Perdí, snif… Tuve que ir a un Starbucks.
Pobre de mi madre, le han de estar zumbando las orejas desde aquella vez que prometí chingar a mi madre si volvía a entrar a una mierda de esas.

Pero es que es inevitable: la gente que te cita para algo –ya sea una cita de trabajo o una reunión de placer- siempre pone como punto de encuentro un Starbucks. "Ay, es que es lo más céntrico", dicen como pretexto. Y sí, tienen razón: por todos pinches lados hay esas cosas afeando la ciudad.

Bueno, el caso es que entré al “Starbuz” (así le digo yo porque soy naco) y aún no llegaba nadie de los que me habían citado ahí. Cuando opté por tomar asiento en los sillones tipo “Friends”, que me topo a dos primillas -una de 13 y otra de 15 años- con su bola de amiguillos lampiños y espinilludos. Noté como que se querían hacer las que no me veían porque “¡qué oso, weee!, ahí está nuestro primo el mayooorrr, weee; qué asco con su barba, weee, o sea, ¿qué hace aquí en un Starbocks?, lugar de reunión de chavos cool y no de rucos, weee…”. Y yo, como buen primo mayor, que me acerco a saludarlas para que les diera vergüenza delante de sus amigos saludar a un señor que no está “en la onda”, jojojo.

Observando su comportamiento adolescente, sus sentados, sus ademanes y vestimentas, pude apreciar que todos andaban con sus mejores trapos, como si estuvieran en un evento de gala o en el lugar más “nice” de Monterrey. También me di cuenta que sobre las mesitas tenían los libros esos de vampiros que andan tan de moda, junto con algunos retazos de revistas con la cara del güerito desabrido que protagoniza la película. Imagino que compraron los libros de más de 600 páginas -cada uno- porque creyeron que vendrían chingos de fotos del güey ése, y se habrán decepcionado mucho al darse cuenta que adentro venían sólo letras y más letras.

Yo no tomo café, pero hice fila, como la gente decente, porque tenía un chingo de hambre. En la fila pensé: “Ya, Guffo, no hagas corajes, no vas a cambiar el mundo y nunca tendrás los huevos para bombardear todos y cada uno de estos lugares del imperialismo yankee; mejor disfruta tu estancia y come rico”. Pero no pude “autoterapearme” y ver la vida color de rosa mientras le echaba un vistazo al menú.

Para empezar: ¿qué pedo con los tamaños de los vasos del café? ¿A quién quieren hacer pendejo? Irónicamente, el vaso más chico se llama “alto”, el mediano se llama “grande” y el más grande se llama… ¡vale verga cómo se llame!, no me acuerdo, pero tiene un nombre mamón y atractivo, como si fuera un vasototote.

Ya me veía yo -si tomara café- pidiendo un capuchino “alto” y que me entregaran el vaso más chiquito. Ya me imaginaba discutiendo:

-Oiga, señorita: es que yo pedí el capuchino “alto”.
-Ése es el tamaño “alto”, señor
-¿Cómo? ¿O sea que el vaso “alto” es el vaso más pequeño?
-Así es, señor. Pero si quiere se lo cambio por uno “grande”.
-Pero el “grande” es el mediano, ¿no? Ahí está, mire: en medio del “alto” y del más grande. Ése no es “grande”, ése es mediano, señorita. Por algo está en medio de los dos.
-Pues aquí ese se llama “grande”, señor.
-¡¡¡AAAAAARRRRRGGGGGGHHHNNNGGGAAAASSSATUMAAADREE!!!


En ese momento sacaba mi metralleta disparadora de espadas Jedi color rojo y mataba a todos.

Un rugido de tripa me sacó de mi trance de asesino serial y continué revisando el menú:
¡Botellas de agua mineral a 35 pesos!, ¡rebanadas de pastel de 50!, ¡sándwiches de 60 pesos sólo porque les dicen “bagel” en vez de “lonche” y lo hacen con un pan más chiquito pero más bonito!, ¡jugos artificiales de 40 bolas!
Aún no salgo del espanto.

Pero dicen que cuando la tripa ruge hay que hacerle caso, y, con el dolor de mi corazón, desembolsé un billete de 100 pesotes y pagué la comida más cara y asquerosa que he probado en mi vida.

Y ahí estaba yo, poniendo buena cara y diciendo que mmm, qué rico estaba todo, sintiéndome una persona cool, que encaja, que come “bagels” raquíticos en vez de “lonches” para estar “en onda”; porque si exigiera el sándwich chingón de la foto de la pared: ése que se ve rebozando en pechugas de pavo, queso “rredetido” y harta lechuga y tomate (nada qué ver con el que en realidad te dan); si lo exigiera igualitito, sería un candidato al manicomio, un ser mala leche como el protagonista de la película “Un Día de Furia”,un ruquito necio y amargado que no se adapta a los tiempos modernos, snif.
Y comí y comí, mastiqué y mastiqué, y en cada mordisco añoré los 100 pesotes que había gastado en esa comida que bien hubieran servido para comprar 12 Tecates Light en lata y olvidar el hambre.

Y dicen que los domingos hay que hacer filas de hasta 40 minutos para comprar un puto café en ese lugar. ¿En serio vale tanto la pena?

domingo, enero 04, 2009

Son las cosas aparentemente sencillas las que conducen a la locura...

Abrieron una Farmacia del Ahorro a lado del negocio de cajas de cartón.
A veces voy a comprar cosas ahí.

La semana pasada fui a comprar un paquete de chicles, de esos que la menta es tan fuerte que queman la boca y provocan sed.

-¿Cuenta usted con su Tarjeta del Ahorro? -me preguntó la mujer de la caja registradora.
-No.
-Ahora mismo le puedo activar una, para que disfrute de sus beneficios.
-No, gracias; sólo los chicles.
-No tiene costo, señor. Es como un monedero electrónico en el que se le van sumando puntos y...
-No, gracias, señorita; sólo los chicles, por favor.

Pagué y me fui.

Eso de andar dando mis datos para que los metan en computadoras y así obtener "grandes beneficios" nunca me lo he tragado. Nadie en la historia de la humanidad ha regalado algo sin esperar un beneficio a cambio. Menos las corporaciones.

Al día siguiente volví a ir a la farmacia, ahora por un bote de agua.

-¿Cuenta usted con su Tarjeta del Ahorro?
-Sí, ya la tengo, gracias -mentí para ver si así evitaba las incomodidades por la que había pasado el día enterior. Grave error.
-Me la permite, por favor.
-La olvidé. No la traigo.
-Me dice su número de cliente, por favor.
-No lo sé, señorita.
-Con su nombre lo puedo buscar aquí en la computadora. ¿Me dice su nombre?
-Nada más cóbrese el bote de agua... por favor.

Salí de aquel sitio infernal añorando los tiempos en que no era complicado comprar chicles y se podía beber agua directamente del grifo.